TODO ES POSIBLE PARA EL QUE CREE

TODO ES POSIBLE PARA EL QUE CREE

Estas sencillas palabras guardan tanta sabiduría, es una gran verdad que conocemos desde hace miles de años, ya que en la cita bíblica de Marcos 9: 23 Jesús dijo: al que cree, todo le es posible.

Creer es igual a tener Fe, no quiero herir susceptibilidades,  ni es que hoy quiera ponerme en plan religioso, pero es que a veces, como las cosas son tan sencillas y las tenemos frente a nosotros y no les damos la importancia que se merecen y después vamos rodando por el mundo buscando, secretos complicados y rebuscados que nos ayuden a salir adelante y lo que pasa realmente es que los hemos tenido frente a nosotros y no nos hemos percatado de que estaban allí.

Retomando, la fe o el creer sin ver, son palabras que por su profundidad son difíciles de definir, sin embargo las definiciones más completas se encuentran en la Biblia donde dice así:

“La Fe es la certeza de lo que se espera,

 la convicción de lo que no se ve”

Lo que significa es que la Fe es una fuerza mental, que nos permite creer con seguridad o certeza, que ya es nuestro lo que esperamos aunque en este preciso momento no lo estemos viendo.

Trayendo esta cita bíblica a la vida actual, realmente es algo que vivimos a diario, pero como creemos que el que tiene fe, necesariamente tiene que ser religioso entonces decidimos no practicarlo.

La Fe es esa fuerza poderosa,  que nos da el valor cada mañana para salir a enfrentar todos los retos, pruebas y por supuesto conseguir los logros propuestos para cada día.

Creer no es tarea fácil, lo primero que tenemos que hacer es cambiar algunos paradigmas, cosas que hemos aprendido de forma consciente o inconsciente, de experiencias propias, e inclusive en muchas ocasiones lo hemos aprendido de vivencias de terceros, desde mucho tiempo atrás.

Pero que aún sigue afectándonos, es decir, nos sale una aparentemente buena oportunidad de negocios, pero como vimos que un familiar, un amigo o incluso nosotros mismos ya lo intentamos y nos fue mal, entonces asumimos que somos malos para los negocios y que todo lo que emprendamos saldrá mal y esta creencia o paradigma nos bloquea totalmente y nos deja actuar en consecuencia y perdemos la oportunidad.

Cuando tenemos una idea, este es el principio de la creación de ese algo, si tu aceptas esa idea como cierta, te gusta, la quieres conseguir, tu corazón siente emoción cuando piensas en esa idea, tu corazón genera una vibración que te motiva a la acción, estos son los primeros pasos que te llevaran a que ese sueño u objetivo sea cumplido.

El  siguiente paso sería, aterrizar esa idea es decir, escribirla, plasmarla en un papel, cuando sacamos las ideas de nuestra mente y las ponemos por escrito es la primera forma de verla ya en el terreno físico, esta simple acción hace que la veamos más real y empecemos a creer que es posible conseguirlo.

Ahora debemos empezar a plantearnos, ¿cómo puedo hacerla realidad?, ¿que necesito para llevarla a cabo?, ¿cuándo voy a hacerlo?, ¿Por qué es buena idea?, ¿para qué sirve?, estas y muchas otras preguntas que nos surjan, al responderlas, iremos dándole más firmeza a la idea y a su vez, viéndola más real.

Después vamos a crear un paso a paso de las acciones que debo hacer para que todo esto se vuelva realidad.

Las cosas siempre parecen imposibles, hasta que hay alguien con suficiente fe, que cree que es posible, y al enfocase en ello, hace que lo imposible para otros, sea posible para él o ella, que se empeñó en creer y actuar en consecuencia.

“No importa lo que los demás digan, solo importa lo que tu creas, si crees que es posible, lo es “

Y para cerrar con broche de oro, otra cita bíblica que dice:

”De cierto, de cierto os digo que cualquiera,

Que dijera a este monte quítate de aquí y échate en el mar,

Y creyere y no dudare en su corazón,

Lo que ha dicho, así será”

                                                                                Marcos 11:23

Como se dan cuenta, nuestro talón de Aquiles es la duda, el que no estén de acuerdo nuestra mente, con la Fe (creer) de nuestro corazón.